martes, 14 de agosto de 2012

Mucho más que un coche


En la era del abs, el airbag y la electrónica integrada, el Seat 600 sigue levantado pasiones. Asequible, de mecánica sencilla y fiable y con un motor que ya en su primera versión casi era capaz de alcanzar los 100 kilómetros por hora, fue el coche que motorizó a los españoles, el que los puso a rodar. Hoy, más de medio siglo después del inicio de su comercialización en nuestro país, en 1957, todavía ruedan por las carreteras unas 10.000 de las más de 800.000 unidades que se fabricaron, la última en 1973. Y están como nuevos.
Ayer, 65 de esos vehículos se reunieron en Parque Astur. Los había de todos los modelos, desde el básico, propulsado por un motor de 633 centímetros cúbicos que rinde una potencia de 21,5 caballos, hasta el sofisticado 600 L, la última versión, que gracias a sus poderosos 32,5 caballos alcanza una velocidad de 120 kilómetros a la hora.
«Para qué ir a más», decía Mauricio Coalla, miembro del club anfitrión, Amigos del 600 de Corvera, y propietario de un flamante 800, un 600 de cuatro puertas. «Sólo quedan unas 200 unidades en España», añadió con orgullo.
El más antiguo y también uno de los más llamativos era un 600 Buggy del año 63. Descapotable, con aspecto de todoterreno playero y carrocería de fibra, llegó a Corvera desde Bilbao, conducido por Alberto Lertxundi.
No era el único Targa (descapotable), ni menos aún el único que despertó la admiración del público. Algunos tenían preparación Abart, casi todos están personalizados y la mayoría presentaba exactamente el mismo aspecto que tenían cuando salieron de fábrica, en la Zona Franca de Barcelona. «Últimamente hay fiebre por la restauración, respetando al cien por cien el modelo original», puntualizó Coalla.
El popular 'Pelotilla' han dejado de ser un coche barato. «Algunos de los que hay aquí valen 20.000 euros, pero será difícil que el propietario -con una media de edad de 55 años- lo quiera vender», manifestó Coalla. Y es que quien tiene un 600 tiene un tesoro sobre ruedas, un icono del automovilismo que al igual que el vino, gana con la edad.
Una vez en Parque Astur, los 65 600 se pusieron en marcha rumbo a Cudillero, para regresar de noche a Trasona. Hoy el destino es Gijón, visita cultural y gastronómica. Después, los 600 emprenderán el camino de regreso a casa, un viaje que en algún caso supera los mil kilómetros, hasta Almería.

Fuente: http://www.elcomercio.es/v/20120805/corvera/mucho-coche-20120805.html
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